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Rosas y Olibano Eucalipto Laurel y Cedro Salvia Blanca Calendula Manzanilla y Olibano Lavanda y Olibano Anis Canela y Olibano Incienso Blanco
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Descripción

Incienso Artesanal
Hecho a mano
Contenido: 9 varillas gruesas de duración extra
Duración: cada varilla dura 50 minutos
Composición: Hojas de Salvia blanca, frankincense, copal, carbón vegetal y aglutinante a base de plantas.

El suave aroma del Incienso Blanco (Frankincense) ha sido considerado desde culturas milenarias como “La puerta de entrada del camino hacia lo sagrado”. La composición de resinas sagradas que posee este sahumerio representan limpieza y purificación de ambientes y personas. Brinda paz y serenidad siendo un ideal compañero de meditación, rituales y ceremonias.


Desde tiempos muy antiguos la Lavanda y el Incienso (Olíbano) son usados en rituales y ceremonias como protectores, purificadores y neutralizadores de energías. La Lavanda posee la propiedad de neutralizar energías negativas transformándolas en positivas logrando equilibrio y armonía. El Olíbano atrae la energía positiva y es limpiador de ambientes. El humo sagrado de ambas fragancias reviven un poderoso protector del hogar.


La salvia por su alto poder esotérico es ampliamente utilizada para atraer la sanación, protección espiritual, limpieza áurica y abundancia. El humo resultante de quemar sus hojas es empleado como puri?cador de ambientes, en especial en los establecimientos comerciales pues ayuda a generar paz y prosperidad económica.

Las rosas se han empleado durante mucho tiempo en mezclas de amor debido a su asociación con las emociones. El poder de las rosa es nada menos que el amor, el amor llena la inmensidad de los espacios, donde hay amor hay vida, donde hay amor hay felicidad, donde hay amor hay amistad y donde hay amor hay prosperidad, paz y renacimiento.

La manzanilla atrae abundancia, paz, amor y tranquilidad, la caléndula simboliza la pasión y la creatividad y el olíbano es un gran purificador natural. Combinados armonizan la consciencia, elevan la vibración y fortalecen nuestro poder interior al liberar rayos de amor, que generan auras de protección, contención y felicidad.

La canela, el anís y el olíbano están regidos por el sol, energía de vida, amor y transformación, crean un nuevo renacer de evolución y espiritualidad, aportando luz a nuestro camino interior y exterior.

 

El eucalipto, el laurel y el cedro ayudan a la apertura de caminos y nuevas posibilidades. Sus propiedades refrescantes estimulan la atmósfera con auras de energía positiva, liberando destellos de luz, sanación, protección y purificación.